miércoles, septiembre 05, 2007

Alberto Olmedo

Mira a la pista de baila. La banda sin director de orquesta, hace lo que puede para tocar "Stardust", en sus dedos tiene un aceituna negra. La pista de baile esta llena de personas que intentar seguir el ritmo de la banda anarquista. Lleva su mano a la boca, que abierta espera el deposito de la aceituna negra.
Las luces están bajas y es una de las pocas personas que esta en la mesa, en las mesas hay algunas personas batiendo palmas o tomando tragos; algunas personas están cerca de la barra esperando sus tragos. No tiene a nadie; esta solo ese día.
Sábado a la noche.
Sábato a la noche, solo en su cama durmiendo persiguiendo a la literatura del "no". Se levanta de la cama, y lentamente se dirige por las escaleras hasta el living. Camina, llega al hogar; las llamas dan el calor que él busca con sus manos extendidas al fuego. Siente que el fuego se esta apagando, y sabe que se va a apagar, ya lo calculo mentalmente. Vuelve lento sobre sus pasos, hasta llegar a su oficina, allí arranca la hoja que estaba en su máquina de escribir y la pone sobre un montón ordenadamente apilado al costado. Agarra el montón, y otra vez (Siendo redundante) vuelve sobre sus pasos. Llega al hogar, aleja el chispero, y una a una va tirando las hijas de tinta al fuego. Una a una mira como su ultima ficción se quema en la hoguera.
Del bolsillo interior de su saco saca un atado de cigarrillos, enciende un cigarro. La fiesta se libera en borracheras y personas no útiles al baile. La banda terminó, y vuelve a empezar "Stardust". Una chica que baila sola, "ella baila sola", piensa, se le acerca bailando y por el baile. El vuelo del vestido, las curvas de la chica, los pelos volando. Vuelve en si, con el cigarrillo en la mano derecha. Pero la chica se pierde entre sus memorias y poesías. Poseía poesías únicas inpublicables sobre esa chica. La quiere ver desnuda. Ella le hará lo que quiera pero no se dejará verse desnuda. "... your naked body..."
En ese momento el autor se da cuenta que su texto no va a ningún lado. Se aburre y lo cierra. Se da cuenta que el procesador de texto de blogger va muy lento y los errores vuelan sobre la pantalla blanca leche, redundante. Deja de escuchar "Leonard Cohen" para saltar por la ventana de su sexto piso. Mientras esta en el balcón mirando el piso, se pone a pensar si el realismo mágico lo salvara.
En el aire se da cuenta que no lo salvó a Olmedo.

1 comentario:

l dijo...

"No la palmarás si con el debido karma te concentras bien en la caída, ¿me comprendes? Debes ir frenando mentalmente en el aire mediante tu descenso. Si obras así, hasta puede que llegues incluso a caer de pie, ya ves."

(Vila Matas, París no se acaba nunca , p. 84 )